Caso 4 Situación de riesgo.
1- Análisis de la
situación.
El caso escogido en el módulo 2, fue el caso 4 que a continuación paso a describir para conocer la
situación de la que partimos.
El grupo-clase que se analiza en el caso 4 es un grupo de 31
alumnos de 15 años de edad, donde encontramos que el 45% son chicas y el 55%
chicos.
El test que los alumnos han realizado es un heteroinforme, que nos
proporciona información de todos los sujetos del aula y nos permite identificar
a aquellos alumnos que cumplen con los patrones de conducta solicitados
(alumnos que acosan a otros, sujetos que no tienen muchos amigos...)
Lo primero que se aprecia es que los alumnos del aula dicen tener
un buen ambiente en clase y un buen clima de aula, sintiéndose bien en la
misma.
Sí reconocen tener un clima en el que a veces hay conflictos y
donde no hay del todo tranquilidad u orden para dar clase.
Los alumnos elegidos como más respetuosos y amables, que serían
aquellos que denominamos como prosociales (de personalidad afable, dispuestos
siempre a ayudar y que conviven pacíficamente) son la alumna 25, el alumno 30,
alumno 22, alumno 20, la alumna 11 y la alumna 4. Destacar de estos almunos al
30 y a la 25 que poseen votos de casi la mitad de sus compañeros.
Además del informe que acabamos de analizar contamos con un
sociograma, herramienta útil basada en el análisis de redes sociales para
construir los grupos que se forman en el aula.
Del sociograma se desprende lo siguiente:
- Hay dos alumnos, el 6 y el 3, que son rechazados. Aunque ambos
poseen un amigo, éste dato no es suficiente para pertenecer a un grupo.
Sin embargo, decir que, el alumno 3, es un alumno con riesgo de
bullying, habiendo 3 testigos.
Estos 3 testigos dicen que aunque al alumno 3 no le pegan o
maltratan físicamente, reconocen que en alguna ocasión le insultan o intimidan,
que sí suele ser más veces aislado, rechazado o le hablan mal y en alguna
ocasión también le molestan por internet o en el móvil.
Estos testigos ven al alumno 3 como un compañero de pocos amigos,
que discute mucho, que es poco tranquilo, diferente a los demás y que se
defiende mal.
2- Características del centro en relación
con el caso.
El
centro en el que trabajo es un Centro de Educación Secundaria y Bachillerato público
de la localidad de Getafe, Madrid.
Es
de línea 2 y las familias de los alumnos matriculados en nuestro centro son
familias con un socioeconómico medio. En nuestro centro encontramos un 15% de
alumnado inmigrante, principalmente de nacionalidad china y latina.
El
centro tiene jornada de mañana pero contamos con comedor para aquellos alumnos
que sus familias lo requieran. Señalar que el comedor es utilizado
principalmente por alumnado de la ESO principalmente.
El
caso que nos ocupa, lo situamos en un aula de 4º de ESO.
3- Medidas organizativas.
Expuesto
el análisis de la situación y habiendo ubicado el contexto de nuestro caso,
paso a continuación a señalar qué medidas organizativas llevaría a cabo,
haciendo especial hincapié en que las actuaciones que vamos a realizar quedan
enmarcadas en el Plan de Convivencia que es regulado por el Decreto de 19 de
abril de 2007 sobre el Plan Regulador de la Convivencia en los Centros y dentro
de Proyecto Educativo de Centro.
Comenzaré
hablando de la organización y vigilancia de los tiempos de entradas y
salidas.
En
mi centro, la vigilancia de las puertas de entrada y salida corren a cargo de
los dos conserjes del centro, uno se coloca en una puerta y el otro en la otra.
La entrada principal tiene telefonillo, por lo que pasada la hora de entrada si
algún alumno quiere acceder al centro, debe llamar al timbre y tras ser
atendido, le abrirán la puerta. Lo mismo ocurre con los alumnos que tiene que
salir antes de finalizar la jornada escolar, pedirán que se les abra la puerta.
De esta manera, controlamos el acceso al centro y además el que los alumnos
decidan a mitad de mañana irse del centro.
En
relación a la organización y vigilancia de los tiempos de recreo decir
que contamos con un Programa de Patios, donde existe un cuadrante de vigilancia
de patios, de tal manera que los patios cuentan con profesorado en determinados
puntos que llamamos “calientes” porque son espacios más escondidos, la zona de
las pistas polideportivas donde podrían surgir los conflictos, el acoso, o
cerca de las vallas, donde podrían los alumnos saltar la valla para ausentarse
del centro.
Estos
puestos de vigilancia son rotatorios.
También
contamos con los conserjes, que controlan la entrada principal al centro,
puesto solo el alumnado de bachillerato
puede salir durante el recreo. Así pues, el acceso a esta entrada está controlado
para permitir salir solo a este alumnado.
En el recreo también contamos con la figura de
los responsables del patio, que son alumnos prosociales de otro cursos
superiores, principalmente de 1º de bachillerato, que de forma voluntaria, tras
hacer unos sociogramas, se les pidió su colaboración para que en los momentos
de patio vigilaran a aquellos alumnos más pequeños, intentaran resolver
cualquier pequeño conflicto y/o comunicaran cualquier situación del patio.
Estos
alumnos, ha sido formados a través de un pequeño programa que pone en
funcionamiento el Equipo de Orientación y donde se les dan unas directrices de
cómo observar, cómo intervenir y donde hay unas reuniones quincenales para
poner en conocimiento del Equipo todas sus intervenciones o situaciones en las
que ellos creen que debemos intervenir directamente.
Otro lugar que
cuenta con bastante importancia en nuestro centro y al cual debemos siempre
prestar bastante atención es el comedor.
Al comedor
asisten como dijimos anteriormente alumnos principalmente de secundaria. Son
alumnos con edades comprendidas entre los 12 y 16 años.
En el comedor
contamos con dos turnos para poder atender a los diferentes horarios de salida
del centro y porque si había que esperar a comer todos en un turno, había
alumnos que tenían espacio largo de tiempo de espera, que al final se convertía
en momentos en los que surgían conflictos. Así bien, se decidió el segundo año
que se puso en funcionamiento el servicio de comedor que se hicieran dos
turnos, para evitar aglomeraciones y esperas innecesarias a aquellos alumnos
que salían antes.
El centro tiene
contratada una empresa de comedor de catering, que nos sirve la comida en el
centro y que es repartida a los alumnos. Existen unos responsables de comedor,
que velan por el saber estar y convivir de forma adecuada en el comedor. Estos
responsables tienen reuniones con el equipo directivo quincenales o en
ocasiones cada tres semanas para comentar cualquier aspecto del comedor y
alumno. De esta forma, el comedor, se convierte en un espacio más educativo y
no es algo ajeno al centro.
En cuanto a la
medida organizativa que elijo para trabajar en el aula es a través del aprendizaje
cooperativo, puesto que me permite el trabajo en grupo estructurado y donde
todos los alumnos interactúen, intercambien información y puedan ser evaluados
de forma individual por su trabajo.
Hablamos que soy
especialista en Educación Física y que en esta área en muchos deporte de
equipo, se necesita la colaboración de todos para la consecución de un fin
común.
Los grupos
formados a comienzo de curso se mantendrán por lo menos un trimestre, de tal
manera que puedan afianzar lazos y consigan un ritmo de trabajo óptimo de
ayuda, colaboración entre los miembros que serán heterogénos.
Para la formación
de los equipos, a comienzo de curso llevo a cabo una pequeña encuesta que deben
realizar de forma personal. En ella aparecen todos los contenidos que vamos a
trabajar a lo largo del curso más o menos desglosados y ellos deben poner qué
se les da bien o les gusta y qué no se les da bien o no les gusta. También
realizamos un sociograma para conocer las relaciones que se establecen en el aula.
Además de esto,
durante las primeras sesiones de septiembre y octubre, realizamos un remix de
contenidos que vamos a realizar para conocer de forma muy breve las relaciones
que se establecen entre el grupo, identificar líderes, alumnos que pasan desapercibidos…aunque
esto sólo nos puede ayudar a hacernos una ligera idea, junto con las encuestas
y sociograma, podemos tener una visión un poco más objetiva de la realidad de
nuestro aula.
La evaluación la
llevaremos a cabo a través de dos formas:
Por un lado una
evaluación individual de los aprendizajes adquiridos por cada alumnos, pero
también una evaluación grupal de todos los componentes del equipo que ha
trabajado junto.
Además contaremos
con las coevaluaciones que dentro del grupo de trabajo se harán los alumnos, de
tal manera que cada alumno evalúe la cooperación, colaboración, ayuda,
disposición, etc., de sus compañeros de grupo, así como se autoevalúe así
mismo.
Con esto, doy por
finalizado mi proyecto final del curso.